Borderline I

Guillermo Laich
11/04/2020 14:10

 

 

Mejor mal acompañada que sola ...

 

Tienes 27 años de edad y acabas de conocer a tu nueva jefa. Es una mujer guapa, elegante, inteligente, y la quieres con locura. Sin duda es tu mejor amiga y la más genial de todas. Has conocido a tu nueva jefa ayer, hace solo 24 horas, pero inmediatamente y sin conocerla ya la consideras tu mejor amiga. Es tu segundo día en un nuevo trabajo, y tu jefa te ha traído una tasa de café caliente y unas sabrosas rosquillas. Es una persona considerada y sensible, y tú la amas con toda tu alma. Incluso, podrías jurar que es el tipo de persona que jamás te fallaria o haría daño. 

Tu nueva jefa no se parece nada a la engreída y desagradecida jefa que tuviste en tu ultimo trabajo. En una ocasión, permaneciste en tu puesto de trabajo durante largas horas redactando un informe especial, y ella ni siquiera se dio cuenta, ni te dio las gracias. Pidió que cambiaras algunas frases y conceptos en uno de los apartados porque eran inexactos y estaban mal escritos. Pues bien, la culpa fue toda de ella, no tuya. De todos modos, fue élla quien te entrego los datos. Si quería que tu corrijas sus textos y referencias, debería habértelo dicho. Cuando se presente una oportunidad, le dirás exactamente lo que piensas.

Te plantastes delante de élla y, con toda tu ira, le dijiste que si le quedaba algo de decencia y respeto hacia ti, hubiera permanecido contigo hasta acabar el informe. Además, ¿por qué tuvo que irse tan temprano a su casa y dejárte sola? Debe de pensar que tienes una vida vacía, que no tienes nada mejor que hacer por las noches, y que eres una persona mediocre. Tu sabes que eres una mujer atractiva, que has tenido muchos novios, y podrías tener uno diferente cada noche.

Sí, deberías haberle dicho precisamente eso … pero no lo hiciste. Simplemente no creías lo suficiente en ti misma ni tenías la suficiente autoestima. Tal vez la llames esta noche y le cantes las cuarenta. Tal vez, pero nuevamente tu baja autoestima te impedira hacerlo. Además, opinas que todas las personas son una de dos cosas: “lo mejor” o “lo peor,” sin estadio intermedio que valga. 

Sin embargo, y por el momento, te sentarás a tomar tu cafe y disfrutaras una de esas deliciosas rosquillas que te han traido. Pues bien, con este historial es muy probable que tengas un trastorno borderline (límite) de la personalidad.
 
 
¿Qué le Sucede a Esta Persona?
 
La autoestima es un aspecto de la identidad de la personalidad. Refleja hasta qué punto uno se respeta, respeta a los demás, y se siente bien consigo mismo. Una autoestima saludable depende de un refinado estado de equilibrio. Uno Debe ser capaz de considerar y reconocer dos vertientes de su personalidad simultáneamente: 1.- las debilidades y las vulnerabilidades, asi como aceptar los errores cometidos en el pasado; y 2.- comprender que uno es básicamente un ser humano digno y honorable, y que su vida tiene buen sentido y dirección, y que además vale la pena vivirla.
 
Algunos trastornos mentales se caracterizan por una cierta "disminución" en los niveles de autoestima: 1.- la depresión; 2.- el trastorno de personalidad evasiva; 3.- el trastorno de personalidad borderline o limítrofe; y 4.-la  ideación suicida, por ejemplo. 
 
Otros trastornos mentales también se caracterizan por un cierto "aumento" en los niveles de autoestima: 1.- la hipomanía; 2.- la manía; 3.- el trastorno de personalidad narcisista; y 4.- el trastorno de personalidad histriónica, por ejemplo.
 
Hace muchos años, los psiquiatras comenzaron a detectar y a describir un tipo de personalidad que les parecía sumamente interesante y, a la vez, desafiante. Inicialmente los pacientes parecían neuróticos, funcionando y adaptándose relativamente bien a la sociedad, pero presentaban dificultades en sus niveles de autoestima.
 
Estando en terapia, mostraban brotes de ira y rabia intensas, así como brotes de desesperación y, a menudo, tenían tendencia a abandonar los tratamientos de manera repentina e impulsiva. También se observo que a veces parecían alienarse perdiendo el contacto con la realidad cuando sus descontroladas y fluctuantes emociones les abrumaba. La única cosa estable que veían los psiquiatras era la inestabilidad de estos pacientes.
 
Su condición, aunque poco comprendida en esos años, fue etiquetada como estar ubicada en el límite entre la neurosis y la psicosis. El nombre "límite" o “borderline” se ha mantenido, aunque muchos psiquiatras ya no consideran el trastorno límite de la personalidad como una condición intermedia. 
 
La “neurosis” y la “psicosis” son dos diferentes tipos de trastornos mentales. La neurosis se refiere a un trastorno mental leve en el cual el paciente se adapta bastante bien a la realidad y la sociedad. Ciertas perturbaciones mentales y físicas, así como conflictos intrapsíquicos caracterizan a la neurosis. La psicosis, por otro lado, es un trastorno mental importante marcado por grandes perturbaciones mentales y emocionales que alejan al paciente de la realidad.
 
Para ser más exactos, el término "borderline" se introdujo por primera vez en los EE.UU. en el año 1938. Era un término que se utilizaba para describir a las personas que, en ciertas situaciones, se pensaba que tenían tendencia a retroceder a un estado de "esquizofrenia limítrofe". En esa época, se creía que las personas con neurosis eran tratables, mientras que las personas con psicosis como la esquizofrenia se consideraban intratables.
 
Luego, en la década de 1970, comenzó a surgir una comprensión más profunda del trastorno límite de la personalidad cuando el psiquiatra austriaco Otto Kernberg (1928 -) definió el trastorno como un nivel medio de organización de la personalidad ubicado entre la psicosis y la neurosis. Las personas que lo padecían típicamente utilizaban dos defensas de yo: 1.- splitting (escision); y 2.- identificación proyectiva. 
 
La escisión o splitting es considerada el mecanismo de defensa más primitivo existente, puesto que se pone en marcha en los primeros momentos de vida del ser humano. En tales momentos, el niño necesita separar radicalmente lo gratificante de lo frustrante para ir organizando su mundo psíquico; si no lo logra, caerá en una situación de confusión sin poder defenderse del peligro ya que no conocerá su procedencia. Es una estrategia defensiva básica donde el individuo es capaz de situar con exactitud lo bueno y lo malo, lo peligroso y lo inofensivo, lo placentero y lo no placentero. De esta forma sabrá qué hacer en cada momento, de dónde viene el peligro, y pudiendo preparar para ello.
 
El mecanismo de defensa conocido como identificación proyectiva consiste proyectar los sentimientos desagradables sobre todos los demás. Echan la culpa a los demás – sean quienes sean - por haberles fallado, por haberles hecho sentir mal, por no haber contado con ellos, por no haber pedido su aprobación, o por perseguirlos. Sienten que están constantemente en un estado de lucha por el poder y que, además, ellos siempre son las victimas. 
 
En base a lo anterior, surgió un patrón de cuatro síntomas clave para describir un trastorno límite de la personalidad: 1.- una imagen de sí mismo inestable y de baja autoestima; 2.- una serie de cambios de humor de rápida fluctuación; 3.- un miedo imaginario o real al abandono; y 4.- una tendencia a la autolesión y a la ideación suicida.
 
Descripción de un Borderline
 
Borderline o limítrofe significa "linea de demarcación" - como se puede apreciar en la foto que encabeza este articulo - pero en nuestro caso significa estar en una posición o estado intermedio: no totalmente clasificable como una cosa o su opuesto especialmente. Nuestra introducción al comienzo de este articulo describe el comportamiento de una persona borderline, siendo la afectación tres veces mayor en mujeres que en hombres y en una relación de 3 a 1, respectivamente. Este hecho de que las personas afectadas sean en un 75% mujeres merece ulteriores estudios para determinar su causa con mayor exactitud.
 
Este trastorno tienen un patrón de por vida de emociones inestables en forma de montaña rusa, relaciones intensas y caóticas, e inestabilidad e indefinición en su identidad y autoimagen. Para ellos, la vida consiste de una actividad súper intensa y tumultuosa, y tienden a experimentar algunos momentos absolutamente maravillosos. Por otro lado también viven muchos momentos terribles, además de cambios constantes, rápidos, y dramáticos en la forma de pensar y sentir acerca de ellos mismos y los demás. Todos los días de sus vidas se maltratan, y sienten miserables e infelices. Algunos de ellos tambien son histrionicos y narcisistas.
 
A veces piensan y sienten como si su pareja o amante fuera una persona maravillosa y perfecta que han conocido; otras veces como si esa misma persona fuese la peor basura que han conocido. La escisión o splitting es un mecanismo de defensa que es típicamente utilizado por los borderline. El mecanismo se desencadena por un determinado evento que hace que el borderline asuma puntos de vista emocionales altamente polarizados. Tales eventos pueden ser muy comunes, como tener que realizar un viaje de negocios con el horario cambiado o tener una discusión con alguien.
 
Este violenta sacudida del pensamiento y del estado de ánimo desde un extremo al otro del espectro emocional suele venir por una decepción o desilusión tanto real como imaginaria. Tal decepción o desilusión suele asociarse a algo que otra persona ha hecho o ha dejado de hacer. Algún hecho que ellos interpretan como que no se les quiere o se preocupa lo suficiente por ellos, ni entienden su forma de ser, ni tiene en cuenta sus más íntimas necesidades.
 
Estas personas siempre están aterrorizadas por la idea de ser abandonadas y harán todo lo posible para evitar cualquier tipo de separación. Ademas son hipersensibles a cualquier signo o insinuación de rechazo, nuevamente de carácter real o imaginario. También tienden a reaccionar exageradamente cuando se enfrentan a modificaciones inevitables y/o a cambios en la planificación de eventos y horarios, y sienten una gran desesperación o arremeten con ira incontrolada cuando alguien cambia la hora de una cita, o cancela la cita, o tal vez llega unos minutos tarde.
 
Tienen tendencia a tomarse demasiado en serio las relaciones amorosas que apenas comienza. Revelan rápida e impulsivamente detalles íntimos sobre sí mismos y se vuelven cada vez más dependientes de la otra persona. Incluso se aferran desesperadamente a la otra persona. Tal comportamiento a menudo llega al punto de "asfixiar" a sus parejas mediante una constante necesidad de atención.
 
Tal actitud suele ser obsesivamente dependiente y tiene tendencia a asustar a la posible pareja, creando asi una ruptura prematura en la relación. Además, tal comportamiento puede causar el tipo de reacción de rechazo hacia ellos que tanto temían desde el principio. Es en ese momento cuando la persona borderline se siente frustrada, furiosa, inútil, y no meritoria des amor ajeno. Es también el momento en que se vuelven peligrosas para los demás y para sí mismos, actuando de forma impulsiva y errática a modo de: "todo vale."
 
La pauta anterior relativa a una intimidad prematura seguida de un rechazo total por la otra persona es una reacción típica y polarizada que tiende a repetirse una y otra vez. Los patrones predecibles de pensamiento y del comportamiento de tales personas resultan en una serie violenta y dolorosa de relaciones amorosas decepcionantes, a continuación seguidas de ideas y amenazas suicidas, hábiles manipulaciones interpersonales, convenientes distorsiones de la información y/o giros de lo sucedido, intentos de suicidio, y otros comportamientos de carácter autodestructivos.
 
Los períodos intermitentes que viven con una intensa felicidad no son más que pequeñas islas en un vasto mar de tristeza, terquedad, amargura, agitación, ira, furia, y resentimiento. Los cambios violentos y dramáticos en la forma en que se perciben a ellos mismos dan como resultado fluctuaciones en los objetivos de la carrera profesional, los valores personales, y los tipos de amigos que tienen. También tratan de sabotear su éxito, de manera consciente o inconscientemente, justo cuando están a punto de lograr un objetivo importante. Hablando metafóricamente, siempre están "llegando" pero "nunca llegan."
 
Por ejemplo, pueden abandonar la escuela secundaria dos meses antes de recibir su diploma o destruir una y prometedora nueva relación justo cuando podría convertirse en una relación madura y duradera. Tienen pataletas y berrinches, generalmente cuando se enfrentan a la frustración y/o al rechazo de cualquier tipo, pero luego sienten una profunda sensación de culpa y vergüenza. Algunas de las rabietas pueden resultar en peleas con daños ligeros o graves para ellos mismos y/o para aquellos que consideran que los ha decepcionado. 
 
Son impulsivos en todas las formas imaginables, incluyendo el uso y abuso de drogas, los atracones alimenticios, el ayuno prolongado y descontrolado, el sexo rápido e inseguro, la conducción rápida e imprudente, el juego (ludopatía) sin sentido, o la compra de cosas que no pueden permitirse ni realmente precisan. A menudo incluso utilizan el dolor físico a modo de una distracción temporal del dolor emocional que sienten. Típicamente se cortan o queman los brazos, el abdomen, y las piernas, todo ello en un frenético intento de lidiar con su ira, desesperación, desesperanza, e ideación suicida.
 
La ideas de suicidio a menudo han sido comparados a profundos sentimientos de vacío y aburrimiento, y por lo tanto son incapaces aguantarse a si mismos.  Muchas personas borderline describen tal vacío como una desesperante sensación de vacuidad interna que no puede ser colmada. No sólo se sienten diferentes e inadecuados, sino también como personas emocionalmente desesperadas. 
 
Por lo tanto, alguien con un trastorno límite de la personalidad es impulsivo, inestable, iracundo, rabioso, exigente, abominable, vacío, desesperado, autodestructivo, y con una gran distorsión en su imagen e identidad.
 
Algunos Datos Adicionales
 
Lo que nadie discute es que los borderline aparentan ser mucho mas y mucho mejor de lo que en realidad son. Son extremadamente atractivos y seductores, y suelen tener “mucha calle.” Este es un hecho que engaña a la mayoría de los ingenuos y también a aquellos médicos novatos con escasa experiencia psiquiatrica. Están enamorados del amor, no de la gente. Todo lo que no sea amor total es odio. Cualquier cosa menos que un compromiso total es rechazo. Esperan  y exigen que los demás hagan por ellos lo que ellos no pueden hacer por ellos mismos. 
 
Incapaces de averiguar que o quiénes son, se fijan en los demás para intentar adquirir una identidad por ósmosis. Crónicamente tristes, vacíos, y desmoralizados, adoptan amigos no porque les gusten, sino porque esperan que los amigos los liberen de su infelicidad. Cuando no lo hacen, los borderline los abandonan y buscan otro salvador, y así repiten el ciclo una y otra vez. Son personas altamente infieles. También son muy manipuladores. Dondequiera que vayan, sus dotes naturales de manipulación logran enfrentar a la gente, crean caos por donde van. Luego se retiran sin que nadie se dé cuenta hasta más tarde que la "inocente borderline” causó todo el lío. 
 
Mientras que la persona borderline está plenamente convencida de que nadie hace lo suficiente por ella, otros las encuentran agotadoras. Se asemejan a un "deposito de gasolina vacío" que constantemente necesita ser reabastecido con amor y reconocimiento. Un hombre que se encuentra en una relación con una mujer borderline pronto se verá absorbido por una situación sumamente melosa y pegajosa. Cuando este intenta enfriar las cosas, la mujer borderline lo castiga y denigra mediante venganzas realizadas vía múltiples llamadas telefónicas a cualquier hora de la noche, o inventando presiones de todo tipo, o a través de chantajes emocionales también de todo tipo. Lo principal es hacer que el amigo se sienta culpable. 
 
Sin embargo, los comportamientos y acusaciones de la borderline siempre contienen la suficiente cuantía de verdad como para colarse bajo la piel del amigo, o sea la víctima. Su hábil arte en la manipulación eventualmente lleva al amigo a tener que disculparse y pedir perdón. Recuerden: en todos los borderline y, debajo de la belleza y la seducción y la locura, … está la maldad.
 

Añadir un comentario:

Nombre:

E-Mail: (no será público)

Comentario:

Enviar >>